Dicen que para llegar lejos en el mundo del cine no solo debes tener talento, sino también un atractivo por encima de lo habitual y sobre todo, mucha suerte. Por cada estrella de Hollywood que se hace conocida en el mundo entero encontramos a centenares de aspirantes que se han quedado en la cuneta. Con los mismos sueños, con las mismas aspiraciones, tal vez incluso con el mismo talento. Sin embargo, la elección de papeles no les ha acompañado. Sus agentes no han sabido venderles bien para el rol que les cambiaría la vida. No han estado en el lugar adecuado, en el momento perfecto. No han llamado la atención de la directora de casting de turno. Razones para no triunfar hay muchas, e incluso aquellos que llegan están en peligro de volver a hacerse invisibles para el público si no toman las decisiones correctas en el momento adecuado.
Alexandra Daddario es uno de esos rostros jóvenes que muchos recuerdan haber visto en los últimos diez años en series y películas. Una chica que, de hecho, ya participaba en anuncios cuando era más joven, y cuyo rostro angelical la había hecho destacar… pero hasta cierto punto. No parecía encontrar los papeles adecuados. No parecía colarse entre las auténticas estrellas de Hollywood, esas a las que todo el mundo conoce, incluso cuando tienes un apellido algo exótico. Sin prisa, pero sin pausa, Daddario iba ganándose poco a poco a la audiencia con papeles muy diferentes. Mucho drama, algo de terror, comedia romántica… Su versatilidad ha quedado patente incluso en proyectos tan potentes como The White Lotus, la serie que finalmente la ha catapultado a la fama mundial. Antes de eso, muchos ya conocían a esta preciosa chica neoyorkina de ojos de cielo, especialmente por una escena muy tórrida que protagonizó en la primera temporada de True Detective. Y es que Daddario ha sabido aprovechar no solo su imagen de niña bonita, sino también su exuberante cuerpo, para convertirse en toda una sex symbol. Sin apenas desnudos en la pantalla, la chica ha logrado estar en la mente de muchos como una de las mujeres más deseadas. Y eso no quita para que su talento como actriz también la haya llevado lejos.
Una joven deslumbrante
Hablábamos al principio del atractivo físico como una de las condiciones ineludibles para llegar lejos en esto del cine. Los actores viven de su imagen, y queda claro que deben llamar la atención del público. No todos pueden ser Angelina Jolie o Brad Pitt, pero por suerte el canon de belleza se está abriendo mucho más. Sin embargo, Daddario siempre ha tenido esa imagen de niña buena, con un rostro angelical en el que destacan sus ojos claros por encima de todo.
Su cuerpo lleno de curvas también ha servido como reclamos en determinadas películas, aunque ella apenas ha grabado escenas explícitas. De hecho, al principio de su carrera era más bien recatada, y su primer gran papel, en la saga Percy Jackson, la convirtió en una heroína para muchas adolescentes. Luego la chica pegó el estirón y buscó papeles más adultos.
Su salto a la fama
Como la mayoría de actrices y actores, Daddario comenzó su carrera con pequeños papeles en series de televisión. Ha aparecido en la mítica serie Ley y Orden, así como en Nurse Jackie. Siendo una adolescente tuvo un papel recurrente en la serie All My Childrens. Su personaje de Annabeth en la saga de Percy Jackson la catapultó definitivamente a la fama, convirtiéndola en una de las actrices jóvenes más prometedoras. Tras llamar la atención por su belleza y su elegancia ante la cámara obtuvo nuevos papeles en series y también en algunas películas, como The Babbysitters o el remake en 3D de La Matanza de Texas, donde ya daba buena cuenta de su exuberante cuerpo.
En 2014 apareció en la primera temporada de True Detective, en un papel secundario, pero que le trajo una fama desmedida en la red. Y todo por una escena de desnudo. Tras viralizarse aquella escena, la joven consiguió nuevos papeles en películas como Baywatch o San Andrés, que tal vez no sean proyectos muy buenos para la crítica, pero son tremendamente comerciales. Eso le sirvió para seguir aspirando a nuevos papeles protagonistas, como el de la película Cuando Nos Conocimos. Junto a Adam Divine, Daddario protagonizaba esta mezcla de Atrapado en el tiempo con La Novia de mi mejor amigo. Resultaba imposible no enamorarse de la cándida y sensual Alexandra en cualquiera de estos roles, pero la chica supo sacarle partido a su lado más sexy en otros papeles que trajeron mucha polémica.
Prostitución y desnudos, sus papeles más polémicos
Internetama los desnudos de las famosas. Eso es algo que llevamos comprobando desde el propio nacimiento de la red, con aquel vídeo viral de Pamela Anderson y Tommy Lee, o con los foros donde se digitalizaban las ediciones de Playboy. Cuando una actriz ha tenido una escena de sexo muy caliente, o un desnudo en una película, el metraje se ha viralizado rápidamente en muchas plataformas. Y aquello fue justo lo que ocurrió con el sorprendente desnudo de Daddario en True Detective. En la serie, la joven hacía el papel de amante de uno de los protagonistas. En una de las visitas del tipo a su casa, Alexandra le ataba con sus propias esposas y se desnudaba por completo sobre él, mostrando sus poderosos pechos. Aquella escena le valió el aplauso de todo el público y una invitación directa al olimpo de las diosas de Hollywood.
Fue, de hecho, la escena de desnudo más explícita de su carrera hasta ahora. Posteriormente ha tenido otras películas donde ha aprovechado su sensualidad, como en Baywatch, o en The Babbysitters, donde incluso hacía de escort de lujo. La serie The White Lotus nos ha traído su segundo desnudo, esta vez mucho menos espectacular, aunque igualmente agradecido. Sin embargo, este papel también le ha servido para demostrar que tiene un gran talento, a la altura de su belleza, siendo nominada por primera vez a los premios Emmy. Daddario ha dado grandes alegrías a sus fans, también en algunas sesiones fotográficas, donde muestra su poderío y su lado más sensual. Sin embargo, la chica no ha sido demasiado profusa en desnudos, aunque todavía está a tiempo de regalarnos grandes escenas de ese tipo.
Un futuro prometedor
Su participación en The White Lotus ha sido determinante para que empiecen a lloverle proyectos en estos momentos. Y es que Daddario ya ha fichado por la adaptación de Las Brujas de Mayfair, una de las sagas más conocidas de Anne Rice, autora de Entrevista con el vampiro.
Así mismo, la actriz neoyorkina también ha participado en Wildflower, una película independiente que aspira a llamar mucho la atención en los circuitos de la crítica. Y todo ello con la vista puesta en conseguir más y más papeles, especialmente en grandes producciones, para dar el salto definitivo en Hollywood. Una estrella como ella, tan deslumbrante, se lo merece.